Sanación y acompañamiento feminista
En nuestro andar caminos con niñas, adolescentas y mujeres periféricas, racializadas, migrantes, de la disidencia sexual, precarizadas, sobrevivientes de violencias y víctimas de feminicidio, acompañamos procesos de búsqueda de justicia y sanación feminista, con quien pide, desea y hasta donde se decida desde la autonomía.
Acompañar y sanar es parte de conectar con la esperanza, la ternura y la vida, porque también hemos sido violentadas y creemos que es posible la búsqueda de justicia y la sanación desde la escucha generosa y la cercanía cuestionadora y dulce, para afianzarnos frente al mundo y ejercer la autonomía a la que tenemos derecho.
Aunque no hacemos litigio, acuerpamos ante las instituciones y sus formas carentes de empatía, desde el deseo de que el acceso a la justicia pueda ejercerse desde otros sitios lejos del adultocentrismo, patriarcado, capitalismo, colonialismo y racismo. Por eso, también abrimos espacios de acompañamiento psicológico y sanación feminista para re-construirnos, volver a nuestros centros y reconectar con la esperanza y la vida.